Vistas de página en total

sábado, 24 de marzo de 2012

Con qué salsa quieren ser cocinados?

Puedes elegir en que banco pones tu dinero???
Puedes elegir en que tipo de colegio metes a tus hijos???
Puedes elegir comprar o alquilar una casa, un piso???
Puedes elegir electricidad o gas???
y así miles de cosas, pero... realmente eliges...
...o sólo elegimos esa salsa con la que nos cocinan???

Le preguntaron a Eduardo Galeano, donde encontraba los temas para escribir y él dijo...
"Es muy simple, escucho lo que dice el pueblo."

...y entonces cuenta que fue un día a un restaurante, se sentó y escuchó hablar al cocinero, y el cocinero había convocado una asamblea donde estaban presentes las gallinas, el pato, los cerdos, los conejos y los faisanes...
...y entonces les preguntó: los he reunido aquí para hacerles una pregunta,
"Con qué salsa quieren ser cocinadas???"
Todos quedaron asustados, hasta que se escuchó a una humilde gallina decir:
"yo no quiero ser cocinada!!!"
...entonces el cocinero dijo:
"Un momento, eso está fuera de toda discusión, ustedes, lo único que pueden elegir es con que salsa quieren ser cocinados."

Eso es lo que en estos momentos nos está pasando a nosotros, que elección tenemos???
Votamos a gente que no tiene el poder real para cambiar las cosas...

Es triste que tras la revolución francesa de 1789, se olvidaran las declaraciones de derechos humanos, hasta que en los años 30, con la ascensión del nazismo y el fascismo, y la 2ª guerra mundial,  tuvo que pasar algo tan monstruoso, con todas las barbaridades que se cometieron, para que en 1948, la sociedad comprendiese que lo único que importaba era respetarse unos a otros, y volver a redactar una declaración de los derechos humanos universal.

Hay dos personas que en aquellos duros años de los campos de concentración, no tenían nombre, uno se llamaba 119104 (Viktor Frankl) y el otro 174517 (primo levi), y que nos han dejado, en sus libros, una monstruosa descripción de la realidad que se vivía en los campos de concentración, los cuales he leído estos días y me recuerdan que a veces la realidad, supera, y muchas veces a la ficción.

Y ahora, en estos momentos, en nuestro presente, el hombre parece que empieza a perder su conciencia histórica, que es la única que puede ponerle en su verdad y salvarle. 

Cada uno de nosotros somos, - Como decía Ortega y Gasset -  "yo y mi circunstancia" y si no la salvamos a ella, no nos salvaremos nosotros.

El capitalismo, hoy en día, ha dejado de ser un capitalismo productivo y se ha convertido en un capitalismo especulativo, en donde las personas no importan como parte del mismo, millones de personas son expulsadas de este nuevo capitalismo, hace unas décadas, ser un trabajador explotado, era objeto de lucha social; hoy en día, ser un trabajador explotado, ha pasado a ser un lujo.



Hace solo unos años ser "mileurista" era ser casi un "pobre"...
...hoy ser "mileurista" es ser un "privilegiado".
Estás dispuesto a perder lo "que" eres, para empezar a ser "quien" querrías que cada uno de nosotros fuésemos???

Una revolución, históricamente...
- piensa Juan Carlos Monedero o quizás Eduardo Galeano o quizás tú, ahora también lo pienses
...se produce cuando los que mandan no pueden seguir mandando como habían mandado hasta entonces, y los que obedecen se niegan a seguir obedeciendo como habían obedecido; y ahora vivimos una muy complicada situación, en la que los que mandan son tan incompetentes, que no pueden seguir mandando como han hecho hasta ahora, pero no está nada claro, si los que obedecen quieren o no, seguir obedeciendo.

En estos momentos de tanta oferta, nos vemos anestesiados, pensando en que vamos a comprar, en vez de pensar en lo que necesitamos, destruimos nuestro bien mas preciado, nuestra vida, en decisiones inútiles e intranscendentes, y la satisfacción que nos producen esas adquisiciones, es tan pasajera, que no tenemos tiempo a pensar en nada mas que seguir comprando. las posibilidades de arrepentirse por elegir mal, aumentan considerablemente cuando las opciones son muy elevadas.


Hay gente que mira al mundo y se pregunta por qué? 
otros miran el mundo y se preguntan por qué no??? 
tú te preguntas algo...
...o prefieres no soñar que otro mundo puede ser posible???

1 comentario:

  1. Extraño "dictador" este Hugo Chávez... Eduardo Galeano.

    Extraño dictador este Hugo Chávez. Masoquista y suicida: creó una Constitución que permite que el pueblo lo eche, y se arriesgó a que eso ocurriera en un referéndum revocatorio que Venezuela ha realizado por primera vez en la historia universal.
    No hubo castigo.
    Y esta resultó ser la octava elección que Chávez ha ganado en cinco años, con una transparencia que ya hubiera querido Bush para un día de fiesta.

    Obediente a su propia Constitución, Chávez aceptó el referéndum, promovido por la oposición, y puso su cargo a disposición de la gente: “Decidan ustedes”.
    Hasta ahora, los presidentes interrumpían su gestión solamente por defunción, cuartelazo, pueblada o decisión parlamentaria. El referéndum ha inaugurado una forma inédita de democracia directa. Un
    acontecimiento extraordinario...
    ...cuántos presidentes, de cualquier país del mundo, se animarían a
    hacerlo???
    ...cuántos seguirían siendo presidentes después de hacerlo???

    Este tirano inventado por los grandes medios de comunicación, este temible demonio, acaba de dar una tremenda inyección de vitaminas a la democracia, que en América Latina, y no sólo en América Latina, anda enclenque y precisada de energía.

    Un mes antes, Carlos Andrés Pérez, angelito de Dios, demócrata adorado por los grandes medios de comunicación, anunció un golpe de Estado a los cuatro vientos. Lisa y llanamente afirmó que “la vía violenta” era la única posible en Venezuela, y despreció el referéndum “porque no forma parte de la idiosincrasia latinoamericana”. La idiosincrasia latinoamericana, o sea, nuestra preciosa herencia: el pueblo sordomudo.

    Hasta hace pocos años, los venezolanos se iban a la playa cuando había elecciones. El voto no era, ni es, obligatorio. Pero el país ha pasado de la apatía total al total entusiasmo. El torrente de electores, colas enormes esperando al sol, a pie firme, durante horas y horas, desbordó todas las estructuras previstas para la votación.

    El aluvión democrático hizo también dificultosa la aplicación de la prevista
    tecnología último modelo para evitar los fraudes, en este país donde los muertos tienen la mala costumbre de votar y donde algunos vivos votan varias veces en cada elección, quizá por culpa del mal de Parkinson.

    “¡Aquí no hay libertad de expresión!”, claman con absoluta libertad de expresión las pantallas de televisión, las ondas de las radios y las páginas de los diarios.
    Chávez no ha cerrado ni una sola de las bocas que cotidianamente escupen insultos y mentiras. Impunemente ocurre la guerra química destinada a envenenar a la opinión pública. El único canal de televisión clausurado en Venezuela, el canal 8, no fue víctima de Chávez sino de quienes usurparon su presidencia, por un par de días, en el fugaz golpe de Estado de abril del año 2002.

    Y cuando Chávez volvió de la prisión, y recuperó la presidencia en andas de una inmensa multitud, los grandes medios venezolanos no se enteraron de la novedad. La televisión privada estuvo todo el día
    pasando películas de Tom y Jerry. Esa televisión ejemplar mereció el premio que el rey de España otorga al mejor periodismo. El Rey recompensó una filmación de esos días turbulentos de abril. La filmación era una estafa. Mostraba a los salvajes chavistas disparando contra una inocente manifestación de opositores desarmados. La manifestación no existía, según se ha demostrado con pruebas irrefutables, pero se ve que este detalle no tenía importancia, porque el premio no fue retirado.

    Hasta ayercito nomás, en la Venezuela saudí, paraíso petrolero, el censo reconocía oficialmente un millón y medio de analfabetos, y había cinco millones de venezolanos indocumentados y sin derechos cívicos. Esos y otros muchos invisibles no están dispuestos a regresar a Nadalandia, que es el país donde habitan los nadies. Ellos han conquistado su país, que tan ajeno era: este referéndum ha probado, una vez más, que allí se quedan.

    ResponderEliminar