Cuando los hombres enarbolan la fuerza;
tanto física como psicológica,
moral e ideológica,
sin sentido,
contra los débiles,
contra los diferentes...
solo pueden considerarlo
como natural,
cuando ellos mismos,
los que la producen,
se debaten en la oscuridad.
Porque la fuerza en sí,
no es sino una casualidad,
nacida
de la debilidad de los otros.
La conquista de cualquier cosa,
mediando la fuerza,
por lo general,
consiste en arrebatársela a los débiles,
a los que son diferentes...
y sabed,
que no es nada agradable
cuando se observa con atención.
Luego,
los débiles,
los diferentes,
deben vivir al borde del precipicio,
pero sin precipitarse...
...
(versos inspirados en la voz de Marlow en "el corazón de las tinieblas" de Joseph Conrad)
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